La seguinte semana continuamos con nuestro trabajo, entrevistando a profesionales de cada área, ajustando los objetivos, realizando los primeros borradores de informe. Pero por las tardes nos invitaban a algunos eventos culturales, como la celebración de los 25 años de «El Pobre Diablo», un lugar emblemático en Quito. La celebración se realizó en el Museo de arte Contemporáneo, un edificio realmente hermoso.
Después nos llevaron a una reunión de «emprendedores», jóvenes ecuatorianos interesados por crear empresas y hacer avanzar su país. Fue un encuentro muy agradable donde tuvimos la oportunidad de hablar con gente muy interesante, activa e inteligente, y aprovechamos para explicarles nuestro programa y nuestra misión en Ecuador -se quedaron muy gratamente sorprendidos!